"La era de los prodigios"

viernes, 15 de abril de 2016

Por ti

Se me ha ido de las manos.
Sí.
Está todo absolutamente fuera de mis dominios, de mi control. No encuentro el principio de la cuerda, no sé de dónde tirar.

Me faltas.
Sí.
Me faltas. Y de qué manera.

El oxígeno solo salva si sale de ti. La vida solo es vida si se muere de ti. Por ti. En ti. Contigo.
Da igual cuándo. Da igual de qué. 
Solo si es por ti. De ti. Contigo.

El sol carece de sentido si no brilla junto a ti. El calor de sus rayos no acaricia, atraviesa. Se clava a través de los párpados, me empaña las pestañas, me nubla la vista.

Al menos eso es lo que digo cuando las lágrimas se dan a la carrera por mis entrañas, por mis mejillas. 
¡Ay de mi! Que sin motivos me encojo y me adentro en la nada, que me oprimo, me deprimo, me emborracho por tu ausencia.

Me faltas.
Sí.
Me faltas. Y de qué manera.

Casi puedo rozarte con mis manos. Casi puedo rodear tus costillas con mis brazos. Apenas un milímetro me separa de ti.
En mi cabeza.
A penas. A alegrías. De ti. Conmigo. Sin ti. Por ti.